Huellas en Papel VII/ No.12 (2019)


La vida que esconde un trazo

Leo la palabra derecho y afirmo que lo que me interesa es el significado, y no la imagen con la que aparece escrita la palabra derecho. Sin embargo, las formas de las letras que se utilizan desde que Johannes Gutenberg inventó los tipos móviles, hace 567 años, tienen una historia; o, más importante aún, motivos culturales y políticos para su uso o rechazo45. Es verdad, el cuerpo de la letra, más allá de buscar la legibilidad del texto, arroja sentidos que exceden el significado de las palabras. Por ejemplo, conocer la historia que llevó a la creación de la letra Comic Sans y su posterior rechazo puede ubicarnos rápidamente en un mundo que linda entre la moda y el comercio. Vincent Connare trabajaba para la empresa Microsoft como ingeniero tipográfico. A principios de 1994, se encontraba probando un paquete de aplicaciones para niños, Microsoft Bob. Los tipos de letras utilizados (Times New Roman46) le parecieron fríos y tradicionales para una aplicación que intentaba un tierno acercamiento al mundo infantil. Entonces buscó un estilo que pareciera dibujado por una ingenua mano alzada, una guía amigable para el pequeño usuario que debía apropiarse de ese entorno que surge de la pantalla, el mouse y el contenido mismo de la aplicación. Aunque Microsoft Bob salió al mundo con letra en el formato original (Times New Roman y Comic Sans no podían intercambiarse por cuestiones de espacio), el tipo creado por Connare fue adoptado con éxito por Microsoft Movie Maker, y luego se globalizó como fuente complementaria en Windows 95. Su uso se extendió ostensiblemente, pero con la llegada del nuevo milenio, la letra fue víctima en Estados Unidos de una campaña que desaconsejaba su uso e, inclusive, de un manifiesto en su contra. Desde entonces la letra Comic Sans se convirtió en un símbolo retro chic para los entornos digitales.

Sin embargo, la elección del cuerpo de la letra puede estar unida a aspectos muchos más oscuros que el gusto. La letra, como portadora de una forma, puede ser también un instrumento político. Estamos hablando de la letra como un útil (como lo puede ser una cincha o una bala) y, en el caso que vamos a analizar (Alemania), como un elemento modelador de la nación.


Página 287 de: Gargantua und Pantagruel / Rabelais ; aus dem französis-chen von F. A. Gelbcke. — Leipzig : Bibliographisches Institut, [1879?]. — 2 v. ; 19 cm.
Alemán; Fraktur.

En la actualidad, el uso del antiguo tipo de letra del manuscrito gótico ha quedado relegado a la evocación de tradiciones, a la cabecera de algunos periódicos, a la necesidad de presunción o lujo, al mundo del heavy metal o a la inscripción de tatuajes. En la actualidad, el uso del antiguo tipo de letra del manuscrito gótico ha quedado relegado a la evocación de tradiciones, a la cabecera de algunos periódicos, a la necesidad de presunción o lujo, al mundo del heavy metal o a la inscripción de tatuajes.Es decir que los tipos góticos perdieron popularidad frente a las letras romanas, de uso creciente muy tempranamente, en siglo XVI, a pocos años del inicio de la imprenta, cuando se comenzó a perder el apego por el gesto de la mano frente al folio.

La historia tipográfica alemana del siglo XX es un caso particular que se enlaza con las arbitrariedades que produjo el advenimiento al poder del Partido Nacionalsocialista Obrero. En Alemania, se usó la letra Fraktur, tipo de letra gótica más sencillo, hasta las primeras décadas del siglo XX. La escritura alemana había encontrado en la Biblia de Martín Lutero de 1523 una “fuente” cultural donde enraizarse y forjar una identidad. Pero en las primeras décadas del siglo XX, la claridad de lectura de la letra Futura sin serifa47, diseñada en 1927 por Paul Renner, avanzó sobre las tierras alemanas, junto con los bolcheviques y los futuristas italianos. Sin embargo, la letra gótica siguió danto batalla en el mundo germano en más de un sentido. El Partido Nazi asumió que solo el estilo gótico de la Fraktur tradicional podía expresar la pureza de su raza, y que el texto romano expresaba una degradación de la nación. De este modo, la forma de una letra formaba parte de la propaganda política y del fomento de la consolidación de la conciencia nacional: “Siéntete alemán, piensa alemán, habla alemán, sé alemán, incluso en tu escritura”48. Hasta que un decreto del año 1941 la prohibió repentinamente. De pronto, la Fraktur fue asociada a los escritos de los banqueros e impresores judíos; entonces le fue asignado otro nombre, ya no se llamó Fraktur sino “Schwabacher judía”. Pero los motivos eran de índole pragmática. “En los territorios ocupados no sabían leerla”, afirma Spiekermann (en Garfield, 2012, p. 202).

Afortunadamente, primero es la vida y después son las formas. Si la tipografía tiene ritmo al igual que la música, los trazos en las letras, como los rasgos de tu cara, nos hablan de un cuerpo. Rasgos, trazos, formas, cuerpos, el cuerpo de la letra y el cuerpo de las personas, cada uno trayendo sus propios sonidos/latidos e impulsos para tañer el concierto del mundo.

Una curiosidad: las letras se agrupan en “familias” como los humanos49. El juego de la vida es un baile que se transita mejor sin las rigideces de un corsé. Ni el rasgo de las etnias ni el trazo de las letras podrán alguna vez silenciar la única pureza posible, el canto que corre debajo de los cuerpos: la única razón de ser de las palabras es dar sentido y consuelo a la existencia.

Referencias

Garfield, S. (2012). Es mi tipo. Buenos Aires: Taurus.

Bibliografía

Laínz, J. (2011). Desde Santurce a Bizancio: el poder nacionalizador de las palabras. Madrid: Encuentro.


45Afirma Garfield en relación a los tipos de letra serif, como las letras Bodoni y Baskerville, “La serifa da a los caracteres un aspecto tradicional, cuadrado sincero, o la apariencia de haber sido tallado a cincel. Su linaje se remonta a los tiempos del emperador Trajano, cuya columna, erigida en Roma en el año 113, presenta una inscripción en su honor y constituye el más influyente ejemplo anónimo de piedra labrada de los últimos 2.000 años” (p. 45).

46La letra Times New Roman, con la que está escrito el texto base de este artículo, fue dise-ñada por Stanley Morison en 1931 con el fin de lograr una mayor claridad en la lectura del diario The Times.

47Serifa o también gracia es el remate o terminal ubicados generalmente en los extremos de las líneas de los caracteres tipográficos (N. de la Ed.).

48Durante el Segundo Reich la Fraktur fue la letra oficial. El canciller Bismarck rechazaba los libros que le regalaban si estaban impresos en letras latinas. El Partido Nacionalista usó la Fraktur en su propaganda, publicaciones y en su ór-gano oficial. Pero en 1941, el secretario de Hitler, Martin Bormann, envía una circular prohibiendo la letra gótica: “En nombre del Führer, anuncio lo siguien-te: es un error considerar la llamada letra gótica la letra alemana. En realidad, la llamada letra gótica consiste en las letras judías Schwabach. Como, tras la introducción de la imprenta, tomaron el control de los periódicos, los judíos re-sidentes en Alemania controlaron las máquinas de imprimir y por eso las letras judías Schwabachn se introdujeron en Alemania. Hoy el Führer ha decidido que en el futuro la letra Antiqua será la normal.” (Laínz, p. 183-184).

49Una familia tipográfica es un grupo de letras que comparten rasgos de diseño comunes. Como las familias humanas, los miembros de una familia (los tipos) se parecen entre sí, pero también tienen rasgos propios. Existen muchas familias tipográficas. Algunas de ellas tienen más de quinientos años, otras surgieron entre los siglos XIX y XX, y algunas son el resultado de la aplicación de los ordenadores a la imprenta y al diseño gráfico. La creación tipográfica de Giambattista Bodoni (1740-1813) significó el nacimiento de la tipografía moderna. La familia tipográfica Bodoni se basa en el contraste entre trazos finos y gruesos, como es posible observar en las variantes de letras que en este momento te encuentras leyendo.