Gioconda Belli*
Y Dios me hizo mujer,
de pelo largo,
ojos,
nariz y boca de mujer.
Con curvas
y pliegues
y suaves hondonadas
y me cavó por dentro,
me hizo un taller de seres humanos.
Tejió delicadamente mis nervios
y balanceó con cuidado
el número de mis hormonas.
Compuso mi sangre
y me inyectó con ella
para que irrigara
todo mi cuerpo;
nacieron así las ideas,
los sueños,
el instinto.
Todo lo que creó suavemente
a martillazos de soplidos
y taladrazos de amor,
las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días
por las que me levanto orgullosa
todas las mañanas
y bendigo mi sexo.
Consejos para
Si eres una
mujer fuerte
protégete de las alimañas
que querrán
almorzar tu corazón.
Ellas usan todos
los disfraces de los carnavales de la tierra:
se visten como culpas, como
oportunidades, como precios que hay que pagar.
Te hurgan el
alma; meten el barreno de sus miradas o sus llantos
hasta lo más profundo del magma
de tu esencia
no para alumbrarse con tu
fuego
sino para apagar la pasión
la erudición de tus fantasías.
Si eres una
mujer fuerte
tienes que saber que el aire que
te nutre
acarrea también
parásitos, moscardones,
menudos insectos que
buscarán alojarse en tu sangre
y nutrirse de cuanto es
sólido y grande en ti.
No pierdas la
compasión, pero témele a cuanto conduzca
a negarte la palabra, a
esconder quién eres,
lo que te obligue a ablandarte
y te prometa un reino
terrestre a cambio
de la sonrisa complaciente.
Si eres una
mujer fuerte
prepárate para la
batalla:
aprende a estar sola
a dormir en la más absoluta
oscuridad sin miedo
a que nadie te tire sogas
cuando ruja la tormenta
a nadar contra corriente.
Entrénate en los
oficios de la reflexión y el intelecto
Lee, hazte el
amor a ti misma, construye tu castillo
rodealo de fosos profundos
pero hazle anchas puertas y
ventanas.
Es menester que
cultives enormes amistades
que quienes te rodean y quieran
sepan lo que eres
que te hagas un círculo de
hogueras y enciendas en el centro de tu habitación
una estufa siempre ardiente donde
se mantenga el hervor de tus sueños.
Si eres una
mujer fuerte
protégete con palabras y
árboles
e invoca la memoria de
mujeres antiguas.
Haz de saber que
eres un campo magnético
hacia el que viajarán aullando
los clavos herrumbados
y el óxido mortal de todos
los naufragios.
Ampara, pero
ampárate primero
Guarda las
distancias
Constrúyete.
Cuídate
Atesora tu poder
Defiéndelo
Hazlo por ti
Te lo pido en
nombre de todas nosotras.
8 de marzo
Amanece con pelo largo el día curvo de las
mujeres, ¡Qué poco es un solo día, hermanas,qué poco, para que el mundo acumule flores frente a
nuestras casas! De la cuna donde nacimos hasta la tumba donde dormiremos -toda
la atropellada ruta de nuestras vidas- deberían pavimentar de flores para
celebrarnos (que no nos hagan como a
Tantas flores serían necesarias para secar los
húmedos pantanos donde el agua de nuestros ojos se hace lodo; arenas movedizas
tragándonos y escupiéndonos, de las que tenaces, una a una, tendremos que
surgir.
Amanece con pelo largo el día curvo de las
mujeres. Queremos flores hoy. Cuánto nos corresponde. El jardín del que nos
expulsaron.
* Poeta
nacida en Managua. Su obra incluye poesía, novela, una memoria y un cuento para niños y ha
sido traducida a catorce idiomas.
Correo
electrónico: tintaleve@aol.com.
Gramma,
XXVI, 54 (2015), pp.
© Universidad del Salvador. Facultad de Filosofía y Letras. Área de Letras del Instituto de Investigaciones de Filosofía y Letras. ISSN
1850-0153.