Miríada. Año 4 No. 8 (2012)

Pobre como siempre: estrategias de reproducción social en la pobreza / Alicia Gitiérrez. Córdoba, Ferreyra Editores, 2004. 453 páginas. ISBN N 987-1110-12

Este libro es el resultado de una investigación de 10 años en el barrio Alto San Martín de la ciudad de Córdoba llevado adelante por la autora. En dicha investigación se estudiaron retrospectivamente las estrategias y trayectorias de 34 familias a lo largo de tres décadas, comenzando por la regularización de la tenencia de la tierra en los ’70 y analizando las estrategias de supervivencia que las mismas pusieron hasta el año 1999.

En primer lugar, cabe destacar la consistencia teórica del libro en dos ejes centrales del mismo: el lugar de la pobreza en su objeto de estudio y el lugar del capital social en su modelo de análisis. Para Gutiérrez, la pobreza es la condición en que están quienes se encuentran en la situación más desfavorable dentro de la ‘sociedad global’. En este sentido no trata la pobreza como un universo aislado que pueda ser explicado por sí mismo. Consecuencia de esta perspectiva es que la indagación de las estrategias y situaciones de las familias del barrio investigado se da junto con la exploración de ámbitos conexos: desde la militancia de los grupos montoneros que visitaron el barrio en los ’70 a las Organizaciones no Gubernamentales (ONG) que aparecieron a finales de los ’70 y prosiguieron en los 80’s, a las condiciones estructurales que profundizaron la pobreza a lo largo de todo el período.

Respecto al capital social, se enmarca en la perspectiva de capital individual de Bourdieu (asociado a los recursos disponibles a través de las relaciones). A la vez, se diferencia de los enfoques en los que el capital social es visto como una vía más o menos segura de escape a la pobreza, es decir, como una fuente de movilidad social de bajo costo sino que, por el contrario, estudia –partiendo de reconocer un carácter estable al orden social en términos de localización de clase– en qué forma las relaciones y las estrategias con otros son relevantes en la reproducción social en la pobreza. En ese contexto, el capital social es con frecuencia un recurso más para la subsistencia.

En segundo lugar, se destaca que el libro introduce antecedentes relevantes en relación a la posición teórica que se sostiene. Los mismos conectan e historian los conceptos de pobreza y marginalidad, tomando como tercer elemento para abordarlos las estrategias de reproducción social. En las diferentes formas de estrategias la autora encuentra un modo dinámico y procesual de ver la evolución de hogares y personas en situación de pobreza. Es curioso respecto a los

Reseñas

antecedentes que a pesar de la centralidad que las nociones de red social y de capital social –tal como se indica en la introducción– tienen para el análisis, las mismas son revisadas sólo hacia el final del capítulo de discusión teórica, dentro del problema de investigación (y no como antecedente), con menor profundidad que los temas de pobreza y marginalidad.

En tercer lugar, es menester señalar que la investigación muestra también una complejidad metodológica singular. Por una parte, el trabajo se nutre de fuentes secundarias diversas. Al inicio del libro se reflejan indicadores y problemas del proceso macroeconómico de empobrecimiento que atravesó la Argentina en el período que observa la investigación. El análisis de las estrategias desplegadas y de los lazos que los pobladores habían establecido con agrupaciones políticas y OGNs sumó fuentes primarias y secundarias adicionales con materiales relativos a estas organizaciones, tanto en términos de testimonios como de fuentes documentales.

Por otra parte, las fuentes primarias han sido construidas desde una diversidad de niveles y técnicas. Comenta Gutiérrez la realización extensa de observación participante pero, también, de entrevistas semiestructuradas a miembros de las familias, a agentes políticos y sociales de la época, a informantes clave cercanos al barrio, como también la reconstrucción de historias de vida y recursos de los hogares por medio de cuestionarios estandarizados.

Asimismo, la presentación de información es igualmente rica. Si bien la forma más frecuente de evidencia lo constituyen relatos de los pobladores del barrio, el libro ofrece cuadros y gráficos sobre la información relevada, en aspectos tales que condiciones de hábitat, trayectorias laborales, niveles de capital económico y educativo, entre otros. En menor medida, se presentan también mapas de las viviendas para reforzar el análisis espacial del fenómeno estudiado.

Por último, en términos de resultados, el libro es consistente con su propuesta: encuentra a un conjunto de familias que parten de ciertos volúmenes de capital, particularmente, estructurado que, a lo largo del tiempo, utilizan sus márgenes de libertad para logra reproducirlos. De esta forma, se presenta a los sujetos en condiciones de pobreza como agentes que actúan a partir de lo que tienen, en oposición a la posibilidad de caracterizarlos por lo que les falta. Asimismo, destaca la capacidad de gestión de las familias, en la organización del uso tanto de su capital económico como en el desarrollo de sus redes entre vecinos y de sus vínculos fuera del barrio.

A modo de síntesis, puede señalarse que el trabajo es un estudio de la vida en la pobreza, antes que un estudio de la vida de la pobreza, lo que salva su de

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sarrollo de caminos sustancialistas condenados al fracaso por tratar entender la pobreza en tanto cosa, perdiendo de vista su carácter específico como descriptor de una posición desfavorable de un grupo de personas dentro de un espacio social más amplio. Gutiérrez, muy por el contrario, logra transmitir con éxito los avatares de estas familias a lo largo de tres décadas, analizando y exponiendo las formas en que logran mantenerse y reproducirse en el contexto cambiante y difícil del barrio Alto San Martín.

Pablo De Grande

Doctor en Ciencias Sociales y Humanas (UNQ). Becario Postdoctoral CONICET con sede en IDICSO/USAL